Para muchas personas, la cuarentena provocada por la pandemia fue su primer contacto con las modalidades de aprendizaje a distancia. En algunos casos, las clases presenciales en la escuela o la universidad se han pasado a este formato; en otros, los profesionales que trabajan desde casa aprovechan el tiempo extra para hacer un curso online.
En cualquiera de los casos mencionados, estudiar desde casa puede no ser tan sencillo como parece. Y a continuación te daremos algunos consejos para que saques más partido a tus estudios y no procrastines demasiado. Empecemos.
Consejos para estudiar en casa de la mejor manera posible
Ofrecemos algunas sugerencias que pueden ayudar a quienes están teniendo su primer contacto con la educación a distancia en este momento. Tanto para los que toman clases online todos los días a una hora determinada, como para los que aprovechan la cuarentena para hacer un curso online, o incluso para los que quieren tener más disciplina para estudiar los libros y temas de su interés, estos consejos pueden ser muy valiosos para estudiar en casa. Compruébalos:
1 – Entender lo que funciona para uno mismo
Los siguientes consejos no tienen un orden fijo, pero este debe ser el primero. Es importante que te prestes atención a ti mismo y a cómo te sientes mientras estudias en casa para entender qué es lo que te funciona. Porque la disciplina de estudio en casa es algo personal, y corresponde a cada persona averiguar, además de estas pautas generales, cuál es la forma más adecuada para ella de crear su disciplina de estudio. En algunos casos, lo que funciona para una persona es exactamente lo contrario de lo que funciona para otra.
2 – Crear un espacio
Es fundamental que dispongas de un espacio adecuado para estudiar. La definición de lo que es un espacio adecuado varía según cada persona, lo ideal es un entorno lo más limpio posible, por ejemplo, elimine los pósters de la pared de la habitación.
3 – Haz tu tiempo de estudio en casa
Al igual que el espacio para estudiar debe ser adecuado, el tiempo también debe serlo. No tiene sentido que una persona nocturna se obligue a hacer un curso a las 7 de la mañana. Se engañará a sí misma y el aprendizaje no será el mismo, es gastar dinero para nada.
En los casos en que las clases tienen un horario fijo y no es posible elegir, sigue siendo necesario reservar algún espacio en la agenda. Lo ideal es que intentes olvidarte de otros asuntos en ese momento. Esto puede ser especialmente difícil para quienes tienen hijos, pero que en este caso, si es posible, es mejor hacer las clases en un entorno separado de los niños.
4 – Aléjate de otras pantallas
Si va a asistir a una clase en línea, necesitará un computador o un teléfono móvil. Y lo ideal es que sea la única pantalla a la que tengas acceso en ese momento. Lo ideal es no estar cerca de la televisión, y el móvil lo dejas en modo avión o apagado, si tienes esa posibilidad.
Lo importante es reducir al máximo la presencia de otras pantallas, porque pueden acabar distrayendo mucho. Es normal que la atención en los estudios oscile, y lo esencial es evitar que se rompa por completo cuando está más baja.
5 – ¡Toma notas siempre!
Las notas son también una parte esencial de los estudios. Aunque el contenido de la clase se podrá consultar después, anotar los puntos más interesantes y las dudas que surjan es una forma de acostumbrarse a esos temas mientras se tiene contacto con ellos.
Los apuntes son también una forma de resumir y poner en palabras los temas estudiados. Esto facilita mucho la tarea si tienes que retomar alguna parte de tus estudios más adelante. Al fin y al cabo, es más fácil encontrar lo que buscas en unas cuantas páginas de tus propias notas que en dos horas de vídeo.
6 – Hacer una lista de tareas
Hay que empezar cada nuevo día de estudio con una lista de tareas. Escriba al principio del día todo lo que tiene que hacer, evitando en lo posible la procrastinación. Esta lista ayuda a establecer un ritmo y a mantener la concentración en los estudios.
Para algunos estudiantes, empezar a estudiar sin un factor externo (como la necesidad de salir de casa o la presencia del profesor) es el mayor reto, y crear una lista de tareas ayuda en esta parte: es más fácil empezar cuando hay un trabajo definido que completar.
7 – Cuidado con los objetivos
Es necesario ser cuidadoso a la hora de fijar los objetivos de estudio. Si son demasiado ambiciosos, pueden empeorar el rendimiento. El periodo de cuarentena que estamos viviendo ha aumentado mucho la ansiedad de la gente, y si nos cargamos demasiado, es un poco utópico. Claro que la gente tiene más tiempo libre ahora, pero no estamos de vacaciones. En este contexto, es importante gestionar las propias expectativas para evitar que esta ansiedad sea aún mayor.
8 – Vigila tu postura
Cuando pasamos mucho tiempo delante del computador, es normal que nuestra postura se relaje. Sin embargo, esto puede acabar perjudicando su rendimiento. Las largas sesiones de estudio frente al computador pueden tener un impacto negativo en el cuerpo de los estudiantes y, por tanto, en su rendimiento.
9 – No ignore la parte técnica
Para asistir a las clases en línea, se necesita una conexión a Internet relativamente estable. Esto es algo que vale la pena pensar antes de que comience la clase, especialmente en el caso de las clases que no están disponibles para ver después. En estos casos, una falla de conexión puede hacer que el alumno se pierda contenidos.
Por eso es importante crear las mejores condiciones de conectividad posibles. Si puedes, conecta tu ordenador al router con un cable de red, para evitar las oscilaciones del internet inalámbrico mejor. Si estás en el móvil, busca un punto en el que la señal wifi no sufra muchas interferencias, y evita ver clases a través de redes móviles (3G/4G) para no acabar con tu paquete de datos.